sábado, 2 de marzo de 2013

¡Conecta, disfruta y vive!



Hace algún tiempo compartía con mis estudiantes de canto sobre la importancia de ser más observadores con todos nuestros sentidos. Este tema lo he compartido con ellos como parte de
una dinámica donde ellos puedan despertar la sensibilidad a muchas cosas en su entorno, o de ellos mismos y no lo disfrutan porque no han sido capaces de observar para lograr valorar. Es un ejercicio que ha ayudado a que mis estudiantes puedan ver la vida de una manera más agradecida y sensible. De ésta manera puedo lograr de ellos que sean más sensibles en su ejecución musical. Antes de que aprendan a ejecutar el canto correctamente, es importante para mí que ellos tengan una conexión de todos sus sentidos en alerta. De ésta manera logro que ejecuten su interpretación no solo con su voz sino con todo su ser. 


Esto es una dinámica que todos deberíamos practicar. Vivimos tan acelerados que pasamos por alto tantas cosas que pudiéramos disfrutar más. La prisa en la vida cotidiana no nos permite ser más observadores con nuestros sentidos. 
Sin darnos cuenta forzamos unos sentidos más que otros sin permitirnos utilizarlos en conexión. Es algo que deberíamos aprender de los animales. Por ejemplo: Oímos un bebé llorar y rápidamente buscamos un chupete o un biberón para dárselo y que el bebé se calme. En cambio los animales reconocen el lloro de sus crías por el sonido, olor, vista y tacto. De ésta manera saben qué hacer con su cría. Esto ocurre porque tienen una conexión de todos sus sentidos en función. Quizá el bebé que le dimos el chupete o el biberón se calme un rato pero en unos minutos volverá a llorar y estaremos desesperados sin saber la razón de su lloro. Al fin y al cabo ese bebé es muy probable que lo único que desea en ese momento es más atención. Que lo tomemos en nuestros brazos para arrullarlo y acariciarlo porque necesita una conexión de sus sentidos con los nuestros. Ese bebé recién ha nacido y tiene la sensibilidad a flor de piel que nosotros hemos perdido en los afanes diarios. 



Cuando nos detenemos a explorar con todos los sentidos, recuperamos la sensibilidad con que hemos nacido. A veces deseamos ser escuchados pero no escuchamos. Deseamos atención pero no somos atentos con todo lo que nos rodea. Es necesario reducir la velocidad en la carrera de la vida para conectarnos con todos nuestros sentidos. De ésta manera podemos ver que la vida es más hermosa de lo que pensamos.

2 comentarios:

  1. Hola Sarie,,cuanta razon tienes,,,,,vivimos acelerados,,,,pendientes de cosas ajenas a nuestra felicidad o lo que verdaderamente debería importanrnos y darle su recpectivo tiempo,,,,,,que bonito post,,,,,,besitos bye bye

    http://www.evanidades.com

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    1. Hola Preciosa. Me alegra te haya gustado. Me da gusto tu visita. Besos!

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